M.B. Franz


BIOGRAFÍA






M.B. FRANZ


Colombia. Escritor exiliado en Orán-Argelia. Su vida es un misterio. Con un coeficiente de 135, a 4 puntos de Neil Armstrong, es considerado casi genio. Fue diagnosticado con Agorafobia después de morir su prometida. Ha sido objeto de persecuciones políticas y censura. Su libro “Manual para mujeres detectives” se convirtió en un clásico de literatura de culto desde el momento de su publicación. Es el maestro del terror en Latinoamérica. Ha cultivado la poesía, el cuento y la novela. Conocido por su aversión a los medios y desaparición repentina, parte de su obra ha sido prohibida por el grupo de la buena moral en Ciudad del Vaticano. Creador de la Vagipoesía o poemas para leer a la vagina. Una nueva expresión que ha derrumbado los cimientos de la poesía universal. Para sus seguidoras es el escritor más sensual del mundo, protagonista de la nueva literatura underground entre los jóvenes, no por nada es el nuevo referente para el Premio Nobel de Literatura. Su obra escandalizó a la sociedad contemporánea, su poesía era prohibida antes de imprimirse, provocó en un ataque rebelde a los sectores conservadores de su entorno por lo cual debió convertirse en un escritor oculto. Al parecer esta aversión a los medios no solo ha sido por seguridad, también ha querido conservar algo de intimidad y anonimato para sí mismo, puesto que muchos lectores tratan en algunos casos de darle más importancia al autor que a lo que se está diciendo, espera que la obra hable por sí misma. Ha escrito los libros:
"Mata todos los caballos" "Bestseller Diario de un asesino"  "El Método Colombiano"
"La Grande Ramera" "Vagipoesía poemas para leer a la vagina" "La Novela Rock" "Historia de la muerte" "Soundtrack" "Novelitas Musicales" "La juventud de las orquídeas" "Eyaculaciones del Chapulín Colorado" “El libro secreto de los psicópatas”.entre otros.


 



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Malala Yousafzai, primera niña en recibir el premio Nobel de la paz, por su lucha contra el asesinato de niños y jóvenes, por defender los derechos de las mujeres y la ratificación del derecho a la educación en Pakistán.

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Soy adicto al sexo, pero también a la literatura, que es lo mismo. –M.B. Franz

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